yo sabía que no había hecho bien mi trabajo.
noté que algo había quedado sin terminar, pero en el momento no me animé a tirar más.
después, esas pequeñas florcitas blancas volvieron a engañarme, se ven tan lindas y diferentes al principio.
ahora, el yuyo volvió con toda su fuerza, incluso se apoderó de un rinconcito del otro lado del cantero.
veo a las plantas de flores rojas preocupadas, mustias.
me da miedo su posible ataque de conquista desde dos frentes.
lunes, agosto 01, 2005
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario