jueves, agosto 25, 2005

y en el techo no hay nada

podría dormirme acá, así, sentada frente a la máquina.
pienso en los anteojos con los ojos dibujados, querría unos de esos, creo que homero simpson los usaba. me encantan los anteojos, afuera hay sol y necesitaría unos oscuros para poder caminar por la calle y ver algo. tal vez me compre un par después, no tengo plata, pero tengo ganas.

también me gustaría tirarme en el pasto y dormir.
y despertarme más tarde y tomar mate y no hacer nada.
y no trabajar mil horas seguidas, volver a casa un rato con insomnio, levantarse, y de vuelta al trabajo.

estoy cansada de leer cosas sobre cosas. estoy cansada de pensar que todo es lindo, pero no lo puedo evitar en estos días soleados.

dos recreos entre ayer y hoy:

uno. café de despedida con tiago. charlamos sobre trivialidades, hicimos promesas de escribir mails, de escribir blogs, de escribir, de tratar de quebrar la distancia por algún lado.

fin de la primer temporada de visitas, en diciembre llega la segunda, con caro y flora.

dos. almuerzo con tomi. mañana se va a bariloche. viaje de egresados. recuerdo el mío, siento que fue hace siglos. me hubiera gustado comprarle un regalo, golosinas para el viaje, algo. sí, fue hace mucho, diez años, yo tenía el pelo larguísimo y ondulado. si ahora estuviera en la secundaria, la pasaría mejor. estoy convencida, pero de nada sirve.

1 comentario:

JB dijo...

yo también la pasaría mejor y esperaría que mi hija la pasara mejor pero creo...creo que no sólo volver al pasado es imposible sino pasarla bien en la adolescencia...qué triste, no? todo tan fresco duro y parado y una tan sufriente...en fin, prefiero ser grande

igual re mandale un saludo a tomi de mi parte y comprale una bolsa con golos a full