jueves, octubre 27, 2005

pompón

en el restaurant chino tienen un conejo blanco y gordo.

camina entre las mesas, se deja acariciar. prefiere el maní, las galletitas y la cerveza, detesta la zanahoria.
si hay ruidos en la calle, levanta las orejas y corre hacia la puerta del local.
ayer se sentó bajo mi silla, se quedó quietito mientras yo lo tocaba y me lamió la mano.
un conejo con actitud de perro, pero suave y con orejas largas.

pistas falsas

amaneció soleado.

soñé que encontraba mis anteojos negros con strass en un baño de la redacción que hacía mucho que no visitaba y que no existe.

en el taxi, apenas podía abrir los ojos por la luz.
recordé los anteojos, llegué a la oficina y fui al baño.
abrí el botiquín.
no había nada.

ahora el cielo está gris.

lunes, octubre 24, 2005

por eso tomo tantos taxis

jueves a la noche, taxi de independencia y saénz peña a billighurst y rivadavia:


"bebota, este país es como una casa donde mamá y papá están en cualquiera"

"el que tenga aunque sea un porcentaje de tu corazón, no debería querer nada más en el mundo. pero vos deberías salir con un croti, un barrendero, un taxista. esos te van a tratar como una reina. todavía sos muy chica, pero yo te digo que si tenés un novio músico, o peor, cantante, vas a ser cornuda de por vida"

"¿trabajás en una revista? aaah, ¿sos modelo?"

"te iba a pedir documento, porque yo a menores no llevo"



sábado a la noche, taxi de independencia y saénz peña a la rioja y chile:


"¿vos cocinaste eso que llevás ahí? ¿nadie te lo preparó?, ¿lo hiciste sola? ¿no querés ser el amor de mi vida?"



por cinco pesos, te llevan, te dan una clase de cívica y te levantan la autoestima.

una ganga.

viernes, octubre 21, 2005

jueves en el salón de chiquita

pasé a buscar a la abuela y fuimos al negocio paquete de las lanas que queda en las heras.
caminamos despacio, la abuela conmigo de un lado y el bastón del otro.

como hace calor, ahora vamos a tejer cinta.

ella me pidió que elija una porque me quiere hacer un foulard. encontramos una muy linda, en un degradé de verdes que parecía fresca y veraniega. lo más raro es la forma, una cinta hueca que se une con pequeños cuadraditos del mismo material a intervalos regulares.
yo me llevé una negra, brillante y aterciopelada, tan escurridiza que se volvía imposible de ovillar.

volvimos con nuestros tesoros a su casa, más tarde llegó maia y nos quedamos tomando el té hasta tarde.

charlando y charlando, sin poner ni un punto.

jueves, octubre 20, 2005

dieta líquida

hoy vine a trabajar de muy mal humor.

abajo había reunión y me hicieron algunos comentarios que me obligaron a reír.

al mediodía, cambié almuerzo por natación. fui a la pileta nueva que queda a una cuadra de acá.
como el día está hermoso, habían abierto el techo y el sol entraba enorme y se reflejaba en el agua.
me gusta mirar los dibujos que hace la luz en el fondo celeste, el movimiento de las líneas mientras avanzo de un extremo a otro.

cuarenta piletas sin parar. en cada respiración, mirar los edificios que se asoman por los grandes ventanales, allá arriba.

cuando terminé, salí, me bañé y me sequé un poco el pelo para no ser tan impresentable-me-voy-al-club-al-mediodía.

ahora el mal humor quedó en el fondo, resitente pero chiquito, y en su lugar, la tranquilidad de que todo va a estar bien y de que hay sol afuera y té con la abuela y maia por la tarde.

2046

triste

linda

silenciosa

miércoles, octubre 19, 2005

lección

juan díaz de solís
recorrió las costas de américa del sur
y llegó a un río tan ancho
que desde una orilla
podía verse la otra.
había descubierto el río.

él lo llamó mar.

navegó por el mar dulce
hasta que encontró una isla, allí
hizo enterrar al despensero de abordo.
había fallecido en el trayecto.
y se llamaba martín garcía.

martes, octubre 18, 2005

¿dónde me quedé?

después de varios días, retomo.

miércoles de presentación, jueves de recuperarse y un viernes muy particular.
salí apurada, con el tiempo justo para caminar bajo el sol hasta la comisaría.

casi dormida, frente a un empapelado con foto del abasto, inventé detalles de un robo en esa jurisdicción (no estaba entre mis planes ir hasta lugano) que incluía cosas como “dame la cartera o te quemo”, frase aprendida hace tres o cuatro años cuando dos adolescentes me sacaron veinte pesos en la puerta del zoológico.

más tarde, desayuno en una mesita en la calle a metros de la casa de la poesía antes de partir en un micro celeste grisáceo de la policía al festival de poesía “yo no fui” en la cárcel de mujeres de ezeiza.

a la vuelta, después de comer unas empanadas reparadoras, hice una mini siesta en casa. un poco por el cansancio y otro poco por todo lo que se habían reído de mí porque no duermo nada y siempre estoy cansada.
a la noche, fiesta de disfraces de lucía.

el sábado intenté resolver el tema del celular que me robaron, pero estaba cerrado. a veces tengo la impresión de que todas las cuestiones prácticas las resuelvo con desvíos. quiero decir, como no pude averiguar nada del telefonito, me compré un florero amarillo y tres bombachas. ayer se me hizo tarde para ir, entonces fui a averiguar a la pileta que está cerca de la redacción para empezar natación ahí.

y así en general, como cuando entré al súper a comprarme un desodorante y salí con un whisky.

el domingo, fuimos con ani y mami a almorzar al bar del museo sívori, en el rosedal. paseamos un poco por ahí y llegamos a escuchar un cover de frank sinatra en vivo. a la tarde, té en lo de la abuela. como todos los años, llegué con tres ramos de flores para las madres: elen, la tía ali y la abuela chiquita.

las flores eran muy raras, blancas y espigadas.


después fiaca, tele y buen fin del fin de semana.

jueves, octubre 13, 2005

memento

claro, finalmente ayer me olvidé abrochadora y cinta scotch.

el día siguiente

me duele un poco la cabeza de tanto brindar ayer.

todo salió bien.
las lecturas estuvieron buenas, la música también.

extrañamos a julia.

vinieron muchos amigos.

sol y van vendieron libros sin parar.

a la salida, rabas, cerveza y papas fritas en la maroma.

hoy, felicidad.

como si fuera un día soleado.

miércoles, octubre 12, 2005

hoy

parece verano.

en la oficina, la alfombra de mi casa, un pie de micrófono, cables, mis dos almohadones bordó, algo donde se enchufa una guitarra, más cables, tela naranja, dos micrófonos, un par de zapatos extra y algunas pavadas que compré mientras corría bajo el sol con el pie del mic en la mano.

casi casi está todo.

(nota: no olvidar la abrochadora y la cinta scotch.)

ahora sólo falta esperar.

martes, octubre 11, 2005

poné el reloj en hora

en mi mundo, donde la heladera no tiene freezer, ni la compu cd, ayer se estrenó kill bill uno.

despojada

el domingo al mediodía, darío me pasó a buscar para ir a la fiesta de la virgen de copacabana.

me dijo que mi equipo no explotaría al enchufarlo y que el techo no era tan alto.

sí, enchufé el equipo de música, con el parlante colgando y todo, y funciona.
y funcionó todo este tiempo.


tomamos un colectivo hasta el lugar de la fiesta, cerca de lugano.

nunca estuve en bolivia pero imagino que debe ser parecido. al menos por la cantidad de bolivianos.
había muchos puestitos que vendían comidas y cosas típicas, y desfiles con unos trajes hermosos, bordados y de muchos colores.
me impresionó cómo las agrupaciones cuidan hasta los mínimos detalles, las mujeres tienen los mismos aros, el mismo peinado y, si sus polleras son muy cortas, hasta bombachas iguales.

me gustaría tener un traje de esos.

tomamos chicha y comimos anticuchos, que son corazones o algo así. suena medio raro, pero son muy muy ricos.

fue como estar de vacaciones por un rato.

a la salida, cuando estábamos buscando un taxi, unos pibes aparecieron por atrás y nos robaron. fue bastante feo. uno de ellos me llevó apenas unos metros para el lado del puente y me asusté bastante porque más allá no había nada ni nadie y no podía ver qué estaba pasando. me tironeó de la cartera y me dijo que se la diera.

eso hice.

se llevó mi dni, tarjeta de crédito, celular, plata, llaves de mi casa, bikini roja, pinturitas y sombrero boliviano.

dos segundos después, pasó un taxi.


igual, no arruinaron mi día.


más tarde, cuando mis piernas dejaron de temblar y paré de apretar los dientes, me fui al pijama party en lo de goli.

sin bikini ni cepillo de dientes.

mañana

miércoles 12 de octubre, 21 hs.
espacio callejón, humahuaca 3759

gog y magog ediciones invita al lanzamiento de sus nuevos títulos:

poesía

botánicos, de walter ch. viegas.

hacer sapito, de verónica viola fisher (reedición).

y continúa la colección narrativa con

rota, de leandro uría, presentada por gustavo nielsen.

lecturas de los poetas y canciones en vivo a cargo de rubín.

viernes, octubre 07, 2005

ju:

estoy con mil cosas a la vez. días de mailing, ensobrar revistas, pegar etiquetas, todo eso que tan poco me gusta hacer.

todos los meses tienen la misma estructura.

pero siguen siendo muy diferentes.

además el miércoles es la presentación y quedan varias cosas paar cerrar.
igual estoy contenta, sólo que un poco cansada.

me gustaría llamarte y charlar un ratito. ahora hay mucha gente en mi oficina, pero apenas pueda pruebo a ver si el teléfono mágico funciona.

este lunes es feriado y el domingo vamos todas a dormir a lo de los papás de goli. un pijama party como antes, ¿podés creerlo?

bueno, linda, te mando un beso enorme a vos y varios para tus peques.

te extraño mucho.

es bonita

finalmente, el bien triunfó y se arreglaron mis problemas laborales.

semana familiar, después de un lunes en lo de ali y una cena el martes en lo de la abuela de mi hermana, el miércoles fui con mamá a ver a maría bethania.

ese mismo día, me enteré de que tenía una sola entrada, así que se la di a ella y yo me colé con ayuda de sol.

fue hermoso.

estuve sentada todo el tiempo entre una vieja inmutable y un gordo gigantesco que hacía pequeñas exclamaciones al reconocer los temas.

lloré todo el recital.

ella estaba hermosa,con el pelo suelto y ya algo canoso, descalza y con una pollera amplia de muchos colores.

al terminar, me encontré con mamá en la puerta.

nos dimos un abrazo muy fuerte.
ella también lloraba.

martes, octubre 04, 2005

shaná tová

ayer, antes de que salga la primera estrella, peleas en el laburo, gritos, indignación por mi parte. silencio y cara de malhumor.

palabras amables y tranquilizadoras de marcelo, él hablaba y yo lloraba de la rabia al tratar de explicarle mi enojo a él que nada tenía que ver.

después larga conversación con mi jefe. sólo quería salir corriendo.

nadar para exorcisar la tensión.


cena de año nuevo en lo mi tía ali. rica comida en familia. intenté olvidar el día laboral, ni lo mencioné. ale me llevó en auto hasta casa.

no sé cómo, me desperté a la mañana con la mochila sobre mi espalda y un saco casi arriba de la cabeza.


un raro comienzo para el 5766.

lunes, octubre 03, 2005

yo vivo en una ciudad

cuando voy en un micro de noche, me encanta ver las ventanitas perdidas en el medio de la nada.

azules por la televisión encendida, blancas de luz de tubo, amarillas como la sombra de los veladores.

familias sentadas a la mesa, frente a la pantalla. alguien lava los platos, una mujer barre.

me imagino cómo será vivir ahí, en el borde de la ruta, rodeada de pasto.


y sé que no lo soportaría.

lobos

sábado.
siete de la mañana. valentín me camina por la cabeza. abro los ojos, abro la ventana, hay un sol enorme.
me levanto, tengo que armar más de veinte sándwiches.
pollo y tomates secos, jamón, queso, tomate y lechuga, salame y queso, y atún y brócoli.
el viernes hice palitos de queso y los carbonicé mientras hablaba por teléfono.
guardó la comida, el rolisec, el mantel de los pececitos y salgo a la calle.
nueve y cuarto. nos encontramos en un garage en bme. mitre y callao, allá nos espera el lobosbus. tengo ganas de fumar. si no estuviera miguel, me sentiría culpable.
vamos charlando todo el viaje.
por la ventanilla, cada vez hay más verde y los árboles son altos.
“mirá las vacas”.
siento que estoy de vacaciones.

llegamos. tomamos un remis hasta la laguna.
flor trajo un mantel a cuadros rojo y blanco. sentados al sol, abrimos el primer vino.

fumamos.

risa.

comemos los sándwiches y unas tartas.
julián trajo la guitarra y cantamos.

flor nos enseña tai chi, intentamos hacer la medialuna. preparamos mate, tomamos vino, comemos pasta frola.
me quedé dormida y me despierto con las voces que se meten de a poco en mi sueño.

en el baño, descubro otros colores, la cara fucsia por el sol, los dientes violetas del vino, la remera fucsia con manchas violetas, el pelo naranja, la vincha fucsia y rosa.

me arde la espalda.

guardamos todo y vamos a esperar el remis. el sol baja, el cielo está de un celeste grisáceo, la laguna también.

de vuelta al lobosbus. viajo charlando entre sueños.