jueves, febrero 22, 2007

salto de cama


7.30 pasadas, suena mi celular. es alegre, el pintor de la casa de mi viejo. van dos veces en cuatro días que mi hermano adolescente no escucha el timbre. me visto mientras marco el número de su casa desde el teléfono de línea y su celular desde el mío. camino de mi cuarto al baño como una loca con un teléfono en cada oreja, trato de sostener el tubo entre la cabeza y el cuello mientras me pongo la pollera negra.


no atiende y lo quiero matar.


bajo, me tomo un taxi.


alegre me espera en la puerta. alegre es alegre. se ríe de mi hermano. yo no me río tanto, entro y lo zarandeo. él no entiende nada, me mira como si yo fuera un extraterrestre que acaba de aterrizar directo en su cuarto. le grito como una loca, él me mira, "decime algo aunque sea, tarado", le digo y pienso: dios mío, soy la peor versión de mí misma, te cagaría a palos, me vas a pagar el taxi y el desayuno, y te juro que te lo voy a cobrar, seguro que me olvidé algo en casa, ¿seguirá lloviendo?, qué nabo es este pibe, no puede ser.


alegre me llama, me muestra el living.


en medio del polvo de una casa en la que están pintando algunos ambientes, seis o siete envases de cerveza distribuidos entre el piso y la mesa de los discos, una botella de fernet, una de vino, ceniceros llenos y, en el medio, una banqueta y una baraja de cartas españolas todas desparramadas como si los jugadores se hubieran dispersado apenas un rato antes.


"si yo me tomo un vaso nomás de este fernet, no me levanto ni loco", dice alegre.


yo seguro que sí. igual trato de recordar cómo era a la edad de mi hermano. qué hacía hace 10 años.


creo que más o menos lo mismo pero sin quedarme dormida tan seguido.


además, nunca me gustó mucho jugar a las cartas.



1 comentario:

myrna minkoff dijo...

alegre debe ser el alegre Evaristo Alegre, maravilloso pintor, rápido y prolijo. Pintó mi casa varias veces, lo recomendé al consorcio y desde que tiene trabajos grandes empezó a mandarse pequeñas cagadas por las que no pude contratarlo más. Hace dos días lo encontré en el subte con su patrona, muy agarraditos. es un tipo muy simpático. será el mismo?